lunes, 6 de abril de 2009

El Toyota que usted no conoce

Todos los caminos llegan a Toyota

En la Prefectura de Aichi (equivalente a lo que en EUA sería un estado) donde la industria automotriz es la industria más grande -emplean a 480.000 trabajadores- se dice que "todos los caminos conducen a Toyota," lo cual efectivamente es corroborado en los mapas locales de la región.

La Toyota Motor Company emplea directamente a 70.000 personas de los alrededores de la ciudad de Toyota (40,000 trabajadores de oficina y 30,000 operarios de las plantas de ensamblaje). Es poco conocido en los EE.UU. que un tercio, 10,000 trabajadores, de la compañía Toyota en la línea de montaje, son trabajadores temporeros o por envío, quienes trabajan por un salario correspondiente al 60% de lo que ganan los trabajadores formales, y menos si contabilizamos los subsidios. Estos trabajadores informales no están sindicalizados. Toyota comenzó esta práctica de contratar trabajadores por temporadas hace más de 30 años, empleando a los agricultores que venían a trabajar durante el lapso del invierno (DEKASEGI). Los trabajadores temporales son empleados con contratos desde cuatro meses hasta dos años y 11 meses. El sistema de doble estándar salarial que Toyota inició en Japón, está siendo implementado en Toyota de los EUA, cuyo efecto mella los salarios y subsidios de toda la industria automotriz norteamericana.

Se estima que al menos 280.000 trabajadores de la Prefectura de Aichi se emplean en plantas subsidiarias que suministran piezas para Toyota. Parte de las piezas que se fabrican en esas empresas, se suministran a otras empresas de automóviles como Honda y Nissan. Parte de la larga cadena de subsidiarias, está plagada de maquiladoras abusivas, incluido el tráfico de seres humanos de decenas de miles de trabajadores extranjeros, -principalmente de China y Vietnam- que son despojados de sus pasaportes y obligados a trabajar horas agotadoras, a menudo ganando menos de la mitad de los salarios mínimos legales.

Visita por la Planta Toyota

A medida que se acerca a la planta Motormachi de Toyota, la segunda instalación más antigua de Toyota que se inauguró en 1959, nos topamos con muchos buses turísticos con pancartas que decían: "Destino, la fábrica más grande del mundo en la fabricación de autos." En esta planta de Motormachi hay 47,00 trabajadores formales a tiempo completo, sin contar los empleados temporales y trabajadores por envío, que arrojan una producción masiva de 13.000 coches y furgonetas al mes. Directores y supervisores de mando medio en las plantas de Toyota en China, Vietnam, Filipinas, Pakistán, India, Tailandia, y una media docena de otros países, se capacitan en la planta Motormachi. Estos cursillistas permanecen aquí varias semanas y hasta medio año antes de volver a su país.

En la sección de soldadura, los enormes robots se movían rápidamente para soldar la carrocería, los visitantes que no están familiarizados con la industria automotriz estuvieron sorprendidos por la precisión y proeza de los mismos. Para colmo, dicen que esos robots están programados para soldar diferentes modelos de coches y mini vans, en cualquier orden en que lleguen a la línea. En inglés, hay un gran cartel que dice: "La planta de carrocería de mi orgullo”.

En la planta había trabajadores moviéndose asiduamente. Vimos un trabajador ensamblar una puerta de coche de principio a fin en 70 segundos, para volver a su lugar y listo para reiniciar con el próximo coche. Este trabajador instala puertas para 51 coches en una hora, que en la jornada de 8 horas de trabajo implican 411 coches.. Como la línea de montaje no se detiene, los trabajadores están siempre en movimiento, entrando y saliendo de los coches, contorsionándose sin cesar hasta culminar su operación. Todas las piezas están previamente clasificadas para proporcionarlas a los operarios constantemente, de tal manera que la línea no para ni una fracción de segundo. Un trabajador de avanzada edad nos explicó que sería muy difícil para alguien de más de 40 años mantener este ritmo. No había mujeres en la línea. Empleados Temporales y de envío trabajan junto a los trabajadores formales, sólo se distinguen por el color de las letras en su sombrero, azul en el caso de los trabajadores formales, y gris para los temporales. A pesar de sus bajos salarios y beneficios, los temporeros estuvieron en movimiento asiduo durante toda la jornada. La administración de Toyota les tiene dicho que si demuestran ser más hábiles que sus compañeros, podrán llegar a ser trabajadores formales, por lo que estos trabajadores temporeros ponen mayor empeño en su trabajo. Por supuesto que nada de esto es explicado en las visitas de la fábrica abierto al público en general.

Una melodía infantil se repetía una y otra vez en el interior de la fábrica. Un sonido que afectaba los nervios. Dicen que es para la seguridad. Cuando esa música suena es que los trabajadores deben estar alertas para no tropezar con las vagonetas movida a control remoto que va transitando por el interior de la fábrica cargadas de piezas y carrocerías. Había muchos dibujos infantiles de animales pegados en las paredes de la fábrica, que instaban a los trabajadores “mantener limpia la fábrica”.

La visita por la fábrica se llevó a cabo por la tarde. El rendimiento de los trabajadores era de 96%. En la parte alta en un panel de avisos luminosos estaba escrito: objetivo de producción de ese día: 313 autos; a esa hora en que estuvimos de visita, deberían haber producidos 277 pero, llevaban producidos sólo 268.

Los trabajadores toman un descanso de diez minutos a un lado de sus líneas. En un estante debajo de una mesa pueden dejar sus merienda, bebidas, teléfonos celulares, camisetas para cambiarse, etc. Sin embargo, vimos que la mayoría de los trabajadores seguían trabajando sin tomar descanso con el fin de ordenar sus piezas y herramientas para el reinicio de la línea.

Tuvimos la oportunidad de ver una de las salas de reuniones en la planta de producción, que tenía una extensión como para unas 15 personas. Los trabajadores de Toyota tienen que participar en reuniones del Control de Calidad en grupos organizados de 10 a 15 personas. Esta es la manifestación de una de la filosofía corporativa de Toyota llamada de “renovación positiva”. Cada mes, se llevan a cabo reuniones grupales y deben presentar por lo menos dos propuestas para mejorar la productividad y reducir aún más los costos. Aunque la actividad es obligatoria, la administración la considera de carácter voluntario y lo que se realiza fuera de la reunión grupal, no es pagada. En la pared de la habitación que visitamos estaba pegado el reporte final del año 2007 sobre el círculo de Control de Calidad. Un grupo había decidido aumentar su producción diaria de piezas de automóviles de 380 a 500 piezas en los tres meses que van de octubre a diciembre, todos estuvieron de acuerdo en el grupo y habían escritos como “Colaboremos”, “Volvámonos hombres haciendo realidad los sueños”. Todos se propusieron el objetivo de aumentar la producción de 120 piezas más al día, es decir 30 por ciento sin ningún aumento salarial

La administración ofrece recompensas a los trabajadores que proponen elevar la productividad, con cupones gratuitos de almuerzo, o con cupones por el valor de unos 5 dólares válidos en las tiendas al interior de la empresa. A veces, las 10 a 15 personas del grupo pueden llegar a obtener cupones de US $ 20 a $ 30 válidos en la tienda de las instalaciones de la fábrica. A pesar de sus enormes ganancias anuales, en lugar de elevar los salarios, la Toyota tiende cada vez más a otorgar bonificaciones e incentivos basados en la evaluación del rendimiento

Le preguntamos a un trabajador de edad avanzada, si entre los trabajadores que participan en las reuniones del Control de Calidad, habría alguno que criticara a la administración de Toyota o planteara inconformidades, el trabajador mayor respondió inmediatamente: "No, nunca ni siquiera se les ha ocurrido, creo yo. ¡Es imposible que ocurriera! "

Es parte de un trabajo de Investigación “El Toyota que usted no conoce”

Elaborado por:

National Labor Committee

Charles Kernaghan, Barbara Briggs,

Xiaomin Zhang, Jonathann Giammarco, James Saylor, Danielle Rosenthal

National Labor Committee

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola amigo administrador.- es increible ver todo eesto y de pensar que un día nuestros esposos estuvieron trabajando ahí, largas jornadas y en turnos de día y de noche, imaginese ud. una de las mejores marcar del mundo explotando al 100 % a sus trabajadores, ellos creen que el precio que uno recibe por sueldo está compensado , claro que no la salud se vá mermando, sabe ?
Yo trabajaba en la Sony de Chiba ken y tambien nos hacían trabajar uuufff rapidisimo y ni para decir no a las horas extras, mi trabajo era kumitate y en esa época los videos pesaban 5 kilos imaginese levantar 2000 diarios para colocarles tornillos (10)
felizmente que esto acabo.
gracias por la información.

Administrador dijo...

En realidad los agradecimientos y las palmas son para el grupo americano que hizo este extraordinario reportaje. Una institución americana National Labor Committee. Ellos son los que hicieron posible que conozcamos estas historias y como dice el titulo: "El Toyota que usted no conoce". Y es el espejo en que todos nos miramos, tal como usted nos cuenta. Es muy similar por todas partes.